5. Invitar a la escritura...continuar "Pilindrajos"
Incorpora en esta entrada la propuesta de tu grupo-mesa sobre el posible desarrollo del relato "Pilindrajos" de Manuel L. Alonso (1990) mostrada en el aula.
(No olviden Indicar los nombres de los miembros del grupo)
CONTINUACIÓN CUENTO PILINDRAJOS -¿Pilindrajos? -dijo Daniel sorprendido- Que nombre más raro. -Que vestido tan raro, ¿y ese sombrero? ¿de dónde lo has sacado? -Daniel estaba muy confuso- No entiendo nada, esta tienda es muy rara. -¿Rara? ¿Por qué te parece rara? -añadió Pilindrajos- ¡Es la tienda más simple del mundo! Daniel echó otro vistazo intentando descubrir si había algún objeto más en la tienda, pero esta estaba vacía, excepto por la flauta que había en el escaparate. -¡Pero si solo hay una flauta! -dijo Daniel. -No, pero la flauta no se vende -dijo la señora. -Ahora si que no entiendo nada... -dijo el niño. El niño sorprendido miraba la flauta cuando Pilindrajos la interrumpió y le dijo: -Tenemos todo lo que puedas imaginar, coge la flauta y traemela. Daniel se acercó con mucho cuidado al escaparate y cogió la flauta llevándosela a Pilindrajos. Daniel dentro de su asombro escuchó como Pilindrajos tocó una pequeña melodía y al terminar le preguntó: -¿Qué te has imaginado mientras escuchabas esta melodía? -Recordé mis vacaciones en las playas de Canarias -contestó extrañado a la pregunta. -Bien... pues mira hacia tu izquierda -añadió Pilindrajos divertida. Daniel con ojos de plato observa que de repente, sobre las estanterías, habían muchas cosas que se usaban para ir a la playa, como toallas, sombrillas, cremas... CONTINUARÁ...
- ¿Te puedo llamar Pili entonces?- preguntó Daniel. - Sí, ¡por supuesto!- contestó Pilindrajo. Para Daniel, el nombre de Pilindrajo se le hacía muy largo. Entonces, el muchacho le pregunta con mucha curiosidad: - ¿Por qué pone en el letrero “cosas” si el único objeto de la tienda es una flauta? - ¡ Ay mi niño lindo! ¿Acaso no eres capaz de ver todo lo que te rodea? Daniel estaba cada vez más intrigado. No paraba de mirarla con cara de asombro pensando si realmente aquella extraña señora estaría bien de la cabeza. Entonces se acordó de una frase que decía su abuelo,” ¡A esta mujer se le fue el baifo!”. iNo había terminado de repetir aquella frase en su mente, cuando Pili dijo: - Sé lo que estás pensando... pero te puedo asegurar que todo lo que tú deseas está en esta tienda - ¡Pues yo solo veo una flauta!- exclamó Daniel. - No te preocupes, si quieres puedes comprobar que es algo más que una flauta. Pili fue directa al escaparate, desempolvó la flauta delicadamente y se la entregó a Daniel. - Toma Daniel, tócala y verás lo que ocurre. Daniel acercó la flauta a sus labios y, con mucha inseguridad, sopló sin saber lo que iba a suceder, nunca había tocado la flauta. En ese momento, las notas del vestido de Pili empezaron a bailar, cobraron vida. De repente a su lado, apareció un perrito pequeño, justo el que le llevaba pidiendo a sus padres durante mucho tiempo y no había tenido. No había salido de su asombro cuando apareció una bicicleta..., no daba crédito a lo que sus ojos veían. Daniel, cada vez más emocionado, asombrado e ilusionado siguió tocando. Las notas que salían de la flauta eran muy hermosas, sonaba a la melodía de una de esas películas que había visto tantas veces. Las cosas que había siempre deseado seguía apareciendo, un juego, un balón...y una voz que empezaba a oir en el fondo de su cabeza, Daniel...Daniel... - ¡Daniel, despierta ya!, se te hace tarde para ir al cole- exclamó su madre. Poco a poco, todo iba cobrando sentido.
TODO HABÍA SIDO UN SUEÑO
Grupo: Sara Dorronsoro Cabrera Cristina D. Hernández Cabrera Blanca López Alvarado Águeda López Flores Adela López Martel Davinia Ravelo Hernández
Esta actividad fue grupal pero por cincunstancias personales no pude hacerlo con mi grupo correspondiente por lo que aqui dejo mi aportación.
-¿Pilindrajo?, dijo Daniel extrañado, ¡Qué nombre más raro! Daniel como un chico observador y curioso no paraba de observar el atuendo de la dependienta hasta que por fin se decidió a preguntarle: -¿Por qué vistes así? La señora que no se esperaba la pregunta de Daniel le respondió:- Me visto así por la misma forma que tú te vistes como te vistes. Yo me visto así porque mi mamá quiere… ¿a ti también te viste tu mamá? La señora ante esta pregunta no supo responderle por lo que se limitó a mirarle con cara de pocos amigos y decir: ¿Qué venias buscando? -Nada. Entraba solo a ver que se vendía en esta tienda, pero como veo que aquí no se vende golosinas me voy, es otra tienda rara que no vende nada.
CONTINUACIÓN CUENTO PILINDRAJOS
ResponderEliminar-¿Pilindrajos? -dijo Daniel sorprendido- Que nombre más raro.
-Que vestido tan raro, ¿y ese sombrero? ¿de dónde lo has sacado? -Daniel estaba muy confuso- No entiendo nada, esta tienda es muy rara.
-¿Rara? ¿Por qué te parece rara? -añadió Pilindrajos- ¡Es la tienda más simple del mundo!
Daniel echó otro vistazo intentando descubrir si había algún objeto más en la tienda, pero esta estaba vacía, excepto por la flauta que había en el escaparate.
-¡Pero si solo hay una flauta! -dijo Daniel.
-No, pero la flauta no se vende -dijo la señora.
-Ahora si que no entiendo nada... -dijo el niño.
El niño sorprendido miraba la flauta cuando Pilindrajos la interrumpió y le dijo:
-Tenemos todo lo que puedas imaginar, coge la flauta y traemela.
Daniel se acercó con mucho cuidado al escaparate y cogió la flauta llevándosela a Pilindrajos.
Daniel dentro de su asombro escuchó como Pilindrajos tocó una pequeña melodía y al terminar le preguntó:
-¿Qué te has imaginado mientras escuchabas esta melodía?
-Recordé mis vacaciones en las playas de Canarias -contestó extrañado a la pregunta.
-Bien... pues mira hacia tu izquierda -añadió Pilindrajos divertida.
Daniel con ojos de plato observa que de repente, sobre las estanterías, habían muchas cosas que se usaban para ir a la playa, como toallas, sombrillas, cremas...
CONTINUARÁ...
Componentes del grupo:
-Beatriz Caño
-Rebeca Dacasa
-Nejma Elkadiri
-Romina Martínez
-Nayra Santana
Estupenda propuesta...
ResponderEliminarSaludos cordiales, Juany
- ¿Te puedo llamar Pili entonces?- preguntó Daniel.
ResponderEliminar- Sí, ¡por supuesto!- contestó Pilindrajo.
Para Daniel, el nombre de Pilindrajo se le hacía muy largo. Entonces, el muchacho le pregunta con mucha curiosidad:
- ¿Por qué pone en el letrero “cosas” si el único objeto de la tienda es una flauta?
- ¡ Ay mi niño lindo! ¿Acaso no eres capaz de ver todo lo que te rodea?
Daniel estaba cada vez más intrigado. No paraba de mirarla con cara de asombro pensando si realmente aquella extraña señora estaría bien de la cabeza. Entonces se acordó de una frase que decía su abuelo,” ¡A esta mujer se le fue el baifo!”.
iNo había terminado de repetir aquella frase en su mente, cuando Pili dijo:
- Sé lo que estás pensando... pero te puedo asegurar que todo lo que tú deseas está en esta tienda
- ¡Pues yo solo veo una flauta!- exclamó Daniel.
- No te preocupes, si quieres puedes comprobar que es algo más que una flauta.
Pili fue directa al escaparate, desempolvó la flauta delicadamente y se la entregó a Daniel.
- Toma Daniel, tócala y verás lo que ocurre.
Daniel acercó la flauta a sus labios y, con mucha inseguridad, sopló sin saber lo que iba a suceder, nunca había tocado la flauta. En ese momento, las notas del vestido de Pili empezaron a bailar, cobraron vida. De repente a su lado, apareció un perrito pequeño, justo el que le llevaba pidiendo a sus padres durante mucho tiempo y no había tenido. No había salido de su asombro cuando apareció una bicicleta..., no daba crédito a lo que sus ojos veían.
Daniel, cada vez más emocionado, asombrado e ilusionado siguió tocando. Las notas que salían de la flauta eran muy hermosas, sonaba a la melodía de una de esas películas que había visto tantas veces.
Las cosas que había siempre deseado seguía apareciendo, un juego, un balón...y una voz que empezaba a oir en el fondo de su cabeza, Daniel...Daniel...
- ¡Daniel, despierta ya!, se te hace tarde para ir al cole- exclamó su madre.
Poco a poco, todo iba cobrando sentido.
TODO HABÍA SIDO UN SUEÑO
Grupo:
Sara Dorronsoro Cabrera
Cristina D. Hernández Cabrera
Blanca López Alvarado
Águeda López Flores
Adela López Martel
Davinia Ravelo Hernández
Estupendoooo
ResponderEliminarSaludos cordiales, Juany
Buenos días, hemos subido la continuación del cuento al foro, ya que éste contiene imágenes.
ResponderEliminarSaludos.
Esta actividad fue grupal pero por cincunstancias personales no pude hacerlo con mi grupo correspondiente por lo que aqui dejo mi aportación.
ResponderEliminar-¿Pilindrajo?, dijo Daniel extrañado, ¡Qué nombre más raro!
Daniel como un chico observador y curioso no paraba de observar el atuendo de la dependienta hasta que por fin se decidió a preguntarle: -¿Por qué vistes así?
La señora que no se esperaba la pregunta de Daniel le respondió:- Me visto así por la misma forma que tú te vistes como te vistes.
Yo me visto así porque mi mamá quiere… ¿a ti también te viste tu mamá?
La señora ante esta pregunta no supo responderle por lo que se limitó a mirarle con cara de pocos amigos y decir: ¿Qué venias buscando?
-Nada. Entraba solo a ver que se vendía en esta tienda, pero como veo que aquí no se vende golosinas me voy, es otra tienda rara que no vende nada.