miércoles

8. Literatura y otras artes (pintura)

Aloja en esta entrada tu actividad elegida (Dossier Módulo I, 4.a.1) referida a la relación literatura-pintura. Se trata de inspirarse en uno de los cuadros ofrecidos en el temario y de realizar o bien un diálogo (para el cuadro 1) o bien un monólogo (si eligen el segundo cuadro).
Cuadro 1 (para crear un "diálogo")

Cuadro 2 (para crear un  "monólgo")

54 comentarios:

  1. Bibiana Caballero Guerra3:39

    La propuesta escogida es la propuesta 1: Elaborar un diálogo entre las protagonistas.
    -¿Pero no lo entiendes? Yo lo que quiero es largarme de esta ciudad, ver mundo, visitar lugares diferentes, desconocidos… conocer gente nueva y no ver siempre las mismas caras aburridas.
    -Pero Laura, tienes 22 años… ¿A dónde piensas ir a parar? Ni siquiera tienes trabajo. Deberías centrarte en tus estudios, en tu novio, en tu futuro hijo…
    -Mamá…..mmm….mejor dejemos ese tema.
    -No Laura, no lo dejo, ahí dentro tienes una pequeña criatura que se está gestando…
    -….Si es que sigue…
    -No te entiendo la verdad. Tienes un novio estupendo, con un buen trabajo como abogado que es, te depara un gran futuro hija, tienes que pensar mejor las cosas…
    -Qué fácil se ve todo desde fuera…no soy feliz con él y lo sabes.
    -No creo que la mejor solución sea…. abortar…Laura, Además tu padre y yo vamos a estar ahí ayudándote en todo lo que podamos, si te marchas fuera….
    -Mamá, para, es mi vida y hago con ella lo que me plazca. Tengo 22 años tú lo has dicho y tengo poder de decisión.
    -Pero sobre ti y no sobre él……
    -¡MAMÁ! …¡QUE PARES!
    -¡A mí no me grites que está toda la gente mirando!
    -¡Es que eres una pesada!
    -Está bien tu verás, tu misma, ya no te lo repito más, pero por favor…antes de tomar una decisión piensa las cosas con cabeza y déjate de locuras.
    -Que si mamá que sí.., y no me vuelvas loca y pide ya la cuenta que me están esperando las chicas para ir de fiesta.

    ResponderEliminar
  2. Lionel Ortega Báez3:53

    - a mí tampoco me resulta cómoda esta situación
    - siempre te he apoyado, pero llega un momento en el que ..
    - ¿momento?
    - Si un momento en el que mis sentimientos por ti se han congelado
    - No me lo esperaba, ¿debido a?
    - No estamos bien miradas y prefiero vivir cara a la galería
    - Tal vez no merezcas una persona como yo, eres tan superficial
    - Lo soy tanto que deseo besarte y prefiero estar mirándote, por si acaso..

    ResponderEliminar
  3. Anónimo3:54

    Francisco Castellano Rodríguez.

    La prepuesta didáctica que elijo es la propuesta número 1.

    - Pues lo que te comentaba Sofía, no sé cómo voy a decírselo a mi padre
    - Pero Ana tienes que ser valiente no vas a poder ocultarlo mucho más tiempo
    - Lo sé pero comprende que no es fácil para mi él siempre ha estado orgulloso de mi y esto
    sería un gran palo para él

    - Él si te quiere lo entenderá, como se suele decir hay que estar “para lo bueno y para lo malo”
    - Ya pero él me aviso y también como se suele decir …”Quien avisa no es traidor”
    - Bueno ya llega un punto en la vida de una mujer que tiene que tomar sus propias decisiones
    y tú debes hacerlo lo antes posible… ¡antes de 9 meses amenos!

    - Bueno a ver qué hago…ups llego tarde que justo había quedado con él
    - ¡Mucha suerte Ana!

    ResponderEliminar
  4. Como se muestra en el ejercicio 3.3 del segundo apartado figura número 3, podemos ver un cuadro donde elaborar un monólogo, y el mío ha sido el siguiente:

    Son las 10 de la mañana y como otro día mas en este mundo incierto, me veo sentado en la puerta de mi bar, con la incertidumbre de si vendrán clientes como ayer, o no aparecerá nadie y me veré obligado a cerrar antes de tiempo mi negocio.

    Esta realidad es un desconcierto permanente, donde no sé si podré seguir manteniendo el negocio que tantos años ha conservado mi familia, y que se ha pasado de generación en generación, o tendré que entregarlo al banco que tanto me reclama los pagos, y de este modo buscar una nueva forma de ganar dinero para vivir...

    ¿trabajar? ¿irme al extranjero? qué será de mi...

    Saludos Estefanía Medina MP.


    ResponderEliminar
  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  6. La propuesta escogida es la propuesta 1: Elaborar un diálogo entre las protagonistas.

    - Lorena: ¡Me voy a recorrer mundo, dejo todo y me voy! ¡Ya no aguanto más!

    - Judit: No puedes irte, tienes que ser como todo el mundo, una trabajadora de bandera, una chica ideal, guapa, educada, preocupada por su familia...

    - Lorena: No aguanto esta vida, esta hipocresía, no aguanto al jefe, me importa poco el
    trabajo, no me gusta, lo odio, si me quedo un día más allí ¡me muero!

    - Judit: Tienes que cotizar para el día de mañana tener una buena jubilación y no estar en la calle, de vagabunda, sin un duro, sin nada.

    - Lorena: ¡Lo dejo todo y listo! de qué me sirve el dinero si soy totalmente infeliz.

    - Judit: Hay que ser como todos los demás... no te puedes desviar porque al final eso se paga caro...ya lo verás...

    - Lorena: ¡Nunca se ha escrito nada de ningún cobarde! Mañana mismo me largo en el primer avión que pille y luego ya se verá lo que haré. La vida son dos días y hay que vivirla. Es mejor perseguir un sueño hasta el final que vivir imaginando qué sería de nosotros si lo consiguiésemos.

    ResponderEliminar
  7. Zeneides Mateo Torres7:43

    Para esta actividad he decidido utilizar la segunda imagen realizando un monologo inspirado a partir del mismo cuadro, titulado “Domingo”; del artista E.Hopper.

    “A veces, me pongo a pensar y me doy cuenta de que he perdido mucha gente importante en poco tiempo. Que gente que yo creía imprescindible ha prescindido de mí.
    Me pongo a pensar que suelo darlo todo por la gente y no suelo recibir nada a cambio.
    Es triste, pero ahora mismo no sé si habrá alguien a mi lado cuando de verdad lo necesite. Porque los "siempre estaré ahí" no existen, son mentiras que dicen en el momento porque quedan bien. Son mentiras que muchas veces me creo por no aceptar que no va a ser así.

    A veces, solo necesito otra sonrisa para sonreír.
    A veces, solo necesito mirar atrás cuando estoy mal.
    Les sorprenderá descubrir lo fácil que es separarse de la gente en esta vida, y por eso, cuando encontramos a alguien a quien queremos conservar, hay que esforzarse por hacerlo.

    Y siempre vamos a tener miedo, incluso si aprendemos a ocultarlo, porque el miedo es como un compañero, no importa el lugar ni la edad.”

    ResponderEliminar
  8. natalia pérez pérez8:43

    La propuesta elegida es el cuadro 1:
    -Ana, debes contárselo lo antes posible.
    -Pero… ¿cómo se lo digo?
    -Deberías ir pensando una forma suave de decírselo antes de soltarle la bomba para que no se lleve el chasco.
    -Vale, en eso he pensado, pero no encuentro el momento para soltarlo.
    -Busca un sitio tranquilo y en el que solo puedan estar tú y el sin que nadie los moleste.
    -Mmm…de acuerdo, esta tarde lo llamaré para concretar un día.

    ResponderEliminar
  9. Ninfa Falcón8:43

    Buenas tardes,
    La opción que he escogido ha sido la del cuadro número 1. Aquí les dejo mi dialogo:
    -No me parece buena idea…
    -¿Por qué no?
    -Es un poco inesperado, requiere tiempo y, sin duda, se dará cuenta.
    -¡No seas tan negativa! Solo es cuestión de organización.
    -Ya, pero con la universidad estoy muy agobiada y no tengo para nada.
    -Siempre hay que tener un poco de tiempo para divertirse. Tranquila, si quieres yo me encargo de buscar el local. Tú solo tendrás que hablar con Samila para ponernos de acuerdo con el día.
    -Está bien. En cuanto tenga novedades te aviso.
    -Ya lo verás Natalina, ¡la fiesta va a ser un éxito!
    -Eso espero…

    ResponderEliminar
  10. Buenas Tardes.

    La opción escogida fue la del cuadro número 2: Monólogo:

    Pues sigo aquí, sentado, un día más y lo único que hago es pensar en yogures, pero no en yogures normales, si no esos que te cambian la vida.

    Lo mejor que nos podría pasar es que las relaciones sentimentales vinieran con fecha de caducidad, como los yogures, así sabríamos de ante mano cual es la fecha del final y por el contrario no perderíamos el tiempo en inseguridades, sospechas ni discusiones nos dedicaríamos a disfrutar cada momento hasta la última décima de segundos. Aunque si lo piensas lo bueno de no tener fecha de caducidad, es que nos permite seguir soñando con que esta vez si este yogur pueda conservarse para siempre.

    ResponderEliminar
  11. La propuesta elegida es la número 1.

    -Esther: ¿Qué te pasa? Te noto triste…
    -Lucía: ¡Ya no puedo más con esta situación! Estoy harta, Alberto no me entiende.
    -Esther: ¿Pero qué les pasa? Se les veía tan felices juntos…
    -Lucía: Estoy frustrada, porque cuando empecé mi relación con Alberto teníamos planes juntos, como viajar por todo el mundo, disfrutar de la vida dándonos siempre nuestro espacio, y ahora Alberto solo quiere formar una familia, casarse e irnos a vivir juntos.
    -Esther: ¿Pero y vuestro compromiso? Sabes que ya está todo preparado y que tarde o temprano el día de tu boda llegará.
    -Lucía: Sí, pero Alberto y yo habíamos hablado de tener un noviazgo más largo sin agobios de boda, conocernos mejor, madurar como pareja y ahora siento que no estoy preparada.
    -Esther: ¿Pero por qué no te sientes preparada?
    -Lucía: Porque quiero disfrutar más de la vida somos muy jóvenes aun y no tengo ganas de comprometerme.
    -Esther: Tranquilízate, habla con él y dile las cosas como las piensas, seguro que solucionan esta situación.

    ResponderEliminar
  12. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  13. La opción elegida ha sido la 2, elaborar un monólogo:

    Que no valgo para esto…después de 30 años dedicándome a trabajar en bares, me dicen que no valgo para esto. Sólo porque se ha convertido en un nuevo bar moderno o “hipster” como ellos lo llaman, porque mi apariencia no les conviene para el nuevo look que quieren dar al lugar. ¿Y cómo le digo yo esto a mi mujer, mis hijos...? Están a punto de acabar la carrera y les había prometido que haríamos un viaje todos juntos, para celebrar tanto esfuerzo, pero ahora no creo que pueda cumplir esto. Aunque…pensándolo bien… ¿por qué en vez de estar aquí lamentándome de mis penas, intento buscar otro trabajo con el que poder darle lo que quiero a mis hijos? O incluso puedo hablar con los de este nuevo bar “hipster” e intentar cambiar un poco mi estilo de vestir…e igual puedo conservar mi puesto. Sea como sea voy a levantarme e intentar buscar una solución.

    ResponderEliminar
  14. Judit Mendoza León11:24

    La propuesta escogida es la propuesta 1: Elaborar un diálogo entre las protagonistas.

    - No sé qué hacer Laura.
    - María tienes que decirle la verdad, no te puedes casar sin decírselo.
    - Peroooooo… Si se lo digo, me dejará.
    - Tienes que decírselo. Muchas personas creen que han superado un error, cuando ya no hay que enmendarlo y no es así. Tú no lo has superado.
    - Ya lo sé y se lo tengo que contar antes de la boda pero me da miedo.
    - El miedo nos hace, a veces, ser fuertes cuando lo afrontamos. Así que se valiente y díselo, si te quiere te apoyará.

    Un saludo,

    Judit.

    ResponderEliminar
  15. Esmeralda González Lemes12:08

    La propuesta que he decidido escoger es la 1ª: Elaborar un diálogo entre las protagonistas.

    -Marta: Briseida, ¿Por qué hemos crecido? Deberíamos habernos quedado como esas niñas inocentes vestidas como muñequitas sin ningún tipo de preocupación.

    -Briseida: Sii Marta, ¡todo precioso! pero sabes que no podemos ir en contra de la evolución, la vida es como un camino en el cual hay una serie de obstáculos que debemos afrontar, y este es uno de ellos, hasta llegar al final.

    -Marta: Cierto, ahí si te doy la razón, pero me encanta recordar aquellos momentos en los que pasábamos las tardes jugando, ver la tele acurrucada a nuestros padres, etc.

    -Briseida: Se que es imposible no recordar esos bellos recuerdos pero mírale la parte positiva a ser una persona adulta, podemos hacer más cosas de forma autónoma, salir sin rendir cuenta a nadie…

    -Marta: Tu lo ves así, pero yo no sé si podré aceptarlo algún día, quizás aun me hace falta madurar y ver las cosas desde otra perspectiva.

    -Briseida: Verás que sí, y aquí tienes a una amiga para que venzas esos obstáculos que tanto te cuestan.

    ResponderEliminar
  16. La propuesta que he elegido es la número 1.

    -Marina: ¿Te acuerdas cuando éramos unas niñas adorables?

    -Escarlata: Sí. Guardo muchos recuerdos de nosotras con nuestras trencitas, los vestiditos y las ganas de jugar.

    -Marina: Ay… ¿Por qué ser adulto será tan complicado? Siempre con preocupaciones, responsabilidades…

    -Escarlata: Bueno, todo depende de las gafas que te pongas para mirar la vida.

    -Marina: ¿A qué te refieres?

    -Escarlata: Sabes que si quisieras podrías dejarte llevar, vivir cada día como un momento único e irrepetible, como cuando éramos pequeñas.

    -Marina: ¡Me encantan tus momentos filosóficos Escarlata! Eres lo que necesito en cada instante, amigas que sean como tú hay pocas.

    -Escarlata: Gracias, pero… ¿seguirás mi consejo?

    -Marina: Por supuesto, cada día es una oportunidad nueva en la que somos dueños de nuestros pensamientos, así que, a partir de ahora no cabrán más pensamientos negativos. Sólo se trata de disfrutar de las pequeñas cosas.

    ResponderEliminar
  17. Samuel Pérez Betancor12:59

    La propuesta que he elaborado es la nº2, el monólogo.

    “Después de tantos años me ha dejado sólo… ¿Ahora qué hago? No tengo trabajo y seguro que me pedirá la manutención de mis dos hijos. Ya me lo dijo mi madre: “Esta chica te quiere sólo por tu dinero Juan”. ¿Por qué no te hice caso mamá?

    Lo peor de todo es que se va con mi mejor amigo Antonio, después de tantos años de amistad, ¿cómo me puede traicionar? Ya decía yo que era muy raro que ella siempre fuera a comprar el pan por la tarde, cuando yo ya lo había comprado por la mañana y siempre sobraban 3 panes… A saber cuántos años me ha tenido engañado... Encima me deja ella a mí, porque siente que ya no la trato como antes y porque me ve mucho con mi amiga Rosa. Así son las mujeres, no pueden ser ellas las que cometan el error.

    A pesar de todo, espero que todo le vaya bien y que me deje ver a mis hijos. Ellos son lo único que me queda.”

    ResponderEliminar
  18. La propuesta didáctica escogida es la 2, la creación de un monólogo inspirado en el cuadro de E.Hopper, "Domingo":

    “Y ahora, un día como hoy, y como otros muchos en los que espero la guagua para volver a casa, después de sesenta y cinco años vividos, es cuando me doy cuenta de lo poco que he vivido… Bueno, de lo poco que he sabido vivir.

    Sí, he sido un buen hijo… Ese hijo obediente y responsable que nunca dio la oportunidad a sus padres de tener queja de él. Sí, he sido un buen hermano, no he dudado en darles lo mío, aunque ello implicase quedarme con poco o con nada. Sí, también he sido un buen amigo, pues con ellos he actuado como si de hermanos se tratasen, sin esperar nada a cambio. Formé una familia y trabajé hasta estar a punto de quedarme sin mi herramienta fundamental de trabajo, esa herramienta imprescindible para un barbero…

    Pero un día como hoy, en la parada de siempre, a la hora de siempre… Ahora lo pienso bien, quizás por la desesperación de llegar a casa y besar a mi mujer o de ver correr a mis nietos o quizás porque estoy realmente en lo cierto… Mis manos, estas manos, han sido herramienta de trabajo y herramienta de ayuda para todo aquel que me la pedido… He sacrificado mis días, mis noches, todo mi tiempo por hacer feliz a los demás… A esas personas que han significado y significan mi razón de vivir. Y es por ello, por vivir para los demás, por lo que me doy cuenta que realmente yo no he vivido. No. Para mí, no he sabido vivir mi vida.”

    ResponderEliminar
  19. - ¡Pero qué hijo de…! –Blasfemó Martina mientras yo, enarcando una ceja completamente desconcertada, dejaba caer la cabeza a un lado sin comprender nada-. Ni se te ocurra girarte de golpe, pero Enrique está en la mesa del fondo, ¿y a que no adivinas qué?

    - ¿Enrique? –clavé mis ojos grises en los suyos y me giré con disimulo a mirar a mi futuro marido dos mesas más allá enfrascado en una animada conversación con una joven sin duda más joven que yo. La rabia me invadió ipso facto y deslicé mi silla con fuerza hacia atrás, arrastrándola: quería ir allí y soltarle cuatro palabras a ese mal nacido… Pero en ese momento sentí la mano de plomo de Martina sujetándome del hombro y obligándome a volver a sentarme-. ¡Te juro que los mato, Martina! Dijo que no volvería a repetirse y ahí está de nuevo con doña perfecta… Con la pelirroja descarada de ojos verdes, metro setenta y curvas de infarto… -ladré.

    - Concéntrate, Maeve, ¿quieres? –Mi mirada la atravesó cual afilado cuchillo, mas luego rodé los ojos, tomé aire y asentí-. Los cretinos como él no merecen que te rebajes a ese nivel –lágrimas de dolor empezaron a correr por mi cara mientras sentía que algo en lo más profundo de mi corazón se rompía en mil pedazos. Martina negó mirándome y secó mis lágrimas, luego me tendió su vaso de agua diciendo-: Vas a ir a esa mesa con la cabeza bien alta, le vas a tirar el contenido de este vaso en la cara y dejarás el anillo sobre la mesa, mientras, yo pagaré la cuenta. Luego, nos iremos por esa puerta y no volveremos a saber nada más de él.

    Y así fue: nunca más supe de él.

    ResponderEliminar
  20. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  21. Buenas noches,

    Para la realización de esta actividad, he escogido el diálogo relacionado con el primer cuadro de E. Hopper titulado Chop Suey (1929).

    - Ana: Me ha pasado algo increíble Dominique, algo que nunca me hubiera imaginado ni por asomo, algo mágico…

    - Dominique: ¿De qué se trata? ¿Todo va bien?

    - Ana: Ayer estaba paseando por “Les Champs Élysées” cuando, de repente, un coche me cogió por sorpresa y caí al suelo. En ese momento, todo mi alrededor se paró como si alguien hubiera congelado el tiempo y mi consciencia…

    - Dominique: ¿Pero estás realmente bien? ¿Fuiste al hospital? ¿Por qué no me has contado nada?

    - Ana: Tranquila, todo va bien, pero todavía no he terminado de contarte…Cuando desperté, miles de imágenes, momentos y sensaciones vinieron a mi mente, como si de un soplo de aire fresca se tratara, pero, al instante, una se quedó un segundo y permaneció para siempre en mi corazón.

    - Dominique: ¿Qué imagen? ¡Me estás asustando!

    - Ana: La imagen de la felicidad, la sensación de que todo fluye a tu alrededor y el momento del presente, de estar viviendo cada instante como si fuera el último, dejando tu mente a un lado.

    - Dominique: ¡Qué locuras dices Ana! ¿Seguro que estás bien?

    - Ana: Estoy mejor que nunca y quiero que esta sensación de estar viva no me abandone jamás, pero, por ahora, vamos a seguir tomando nuestro té.


    Un saludo,

    Patricia.

    ResponderEliminar
  22. Mª Inés Estupiñán Henríquez14:18

    Aquí alojo la propuesta número 2: el monólogo.
    ‘He aquí, una mañana más, casi recién salido del trabajo. Un domingo más, sentado en esta misma acera. Acera que parece familiar pero a la que no sé llegar más que con unos cuantos tragos de más. Y siempre con la misma incertidumbre de cómo pasa la vida. Y qué he hecho más que trabajar cada noche para mantener a mi familia. Y qué historias les contaré a mis nietos sobre mi vida. Recuerdo aquellas historias fantasiosas, bueno, para mí siempre lo serán, que mi abuelo me contaba, trabajaba en los barcos y andaba siempre de puerto en puerto. En cada uno, un millón de aventuras y personajes. Qué bonito llegar a esta edad y tener algo que merezca la pena contar. No para satisfacerse a uno mismo sino para satisfacer nuestro recuerdo, para que aquellos que nos preceden no nos olviden porque, al fin y al cabo, la vida pasa y se nos pasa. Y mi vida, sigue pasando y se me ha pasado, aquí, en esta acera, mientras el taxi llega.’

    ResponderEliminar
  23. Buenas noches,

    La propuesta que he escogido para realizar esta actividad es la propuesta 1 que trata de elaborar un diálogo entre las protagonistas.

    Persona A (Fátima): ¿cómo te ha ido el día de clase de hoy?

    Persona B (Adela): muy bien Fátima, aunque hoy no hemos tenido muchas actividades prácticas.

    Persona A (Fátima): ah, genial ya que no tendrás que corregir muchos cuadernos y tendrás la tarde libre.

    Persona B (Adela): ¿y a ti cómo te ha ido en tu nuevo colegio, Fátima?

    Persona A (Fátima): no muy bien, me estoy pensando cambiarme de colegio.

    Persona B (Adela): ¡lo siento! ¿Y qué es lo que te ha sucedido?

    Persona A (Fátima): no me encuentro cómoda, el ambiente de trabajo no es el adecuado.

    Persona B (Adela): ¿y qué piensas hacer?

    Persona A (Fátima): no lo sé todavía, ¿y tú qué me aconsejarías?

    Persona B (Adela): mi consejo es que hables con la directora del centro educativo y le comentes tu situación laboral.

    Persona A: (Fátima): me parece buena idea, mañana iré a su despacho y hablaré personalmente con ella.

    Un saludo,

    Ángela.

    ResponderEliminar
  24. Imagen 2: “
    ¿Cómo me va a suceder esto a mí? Todavía no sé cómo ocurrió todo. ¿Por qué me habré metido en este trabajo? Es un gran esfuerzo para mí tener que verla todos los días, tan radiante como siempre, atrayéndome desmesuradamente. Esa risa contagiosa que oigo desde la cocina. Yo, que la quiero tanto y ella, que me trata como trapo sucio. Yo, que todo se lo he dado, y ella menospreciándome. En serio, me gustaría desaparecer de este bar de mil diablos. No puedo más. ¿Cuándo llegará el día que entre por la puerta y me diga “buenos días Señor González” y me dedique una sonrisa? ¿Cuándo llegará el día que me pida algo con educación, con humildad, con delicadeza? Como la trato yo a ella. Incordio de mujer, que vaga día y noche por mis pensamientos. No la quiero ver más, me hace daño, me manipula, me enerva, me fascina, me asombra, me bloquea, me quita la vida…

    Quiero sacar fuerzas, poder pasar de ella, tratarla como se merece. Pero no, pensándolo bien, no me voy a comparar. Yo soy una persona humilde, agradecida con la vida, positiva, alegre pero triste a la vez.

    Dejemos los malos pensamientos, voy a ser verdadero. Lo que está para mí, estará para mí. Quizás el destino me esté poniendo a prueba, pero ¿sabes qué? Que lo voy a conseguir. Ni tú, destino, ni ella, dulce caprichosa, van a hacer que me desplome. La vida, el tiempo, pone a cada uno en su lugar. La vida pisa fuerte, pero yo piso más.

    Total, si algo acaba mal es porque todavía no ha acabado.

    Y finalmente… Ella: “¡Buenos días Señor González!”

    ResponderEliminar
  25. Samantha González Ramírez4:15

    Imagen 1:

    - Amiga, me marcho, ya no me queda nada aquí.
    - ¿Qué dices amiga? ¿Cómo que te marchas?
    - Federico Antonio me ha dejado, no tengo a nadie, ni trabajo, ni siquiera una casa donde vivir… Mi madre me ha dicho que vuelva a Venezuela. Me fui de allí pensando que me iba a comer el mundo y voy a tener que volver con la cabeza agachada.
    - Pero ¿por qué? ¿qué pasó? ¿por qué te dejó?
    - Me pilló con Jesús Manuel en su despacho y cómo comprenderás me dejó y me ha despedido.
    - Lo siento amiga, te echaré de menos.
    - Y yo a ti, pero sabes que siempre tendrás una amiga y aunque estemos lejos me puedes llamar y vernos en vacaciones.
    - Ojalá que te vaya bonito y ya nos veremos amiga.

    ResponderEliminar
  26. Vicente Javier González Rodríguez5:38

    Imagen 1: Diálogo entre dos amigas.
    - Laura: Hola amiga. ¡Cuánto tiempo!
    - Daniela: Si, ya tenía muchas ganas de volver a verte.
    - Laura: ¿Qué tal te va la universidad?
    - Daniela: La universidad muy bien. Este año finalizo mis estudios si todo sale bien.
    - Laura: ¡Que guay! ¿Qué tienes pensado hacer una vez termines la universidad?
    - Daniela: ¡Pues no sé! Tengo muchas ideas en mente pero por ahora no me he parado a reflexionar. ¡Aún tengo tiempo!
    - Laura: Sí, hay un año de por medio. Mi idea era irme al extranjero a mejorar mi inglés, pero estoy pensando que igual me vendría bien un año sabático, que tan de moda está.
    - Daniela: ¡Ay! ¿Año sabático?
    - Laura: Sí.
    - Daniela: A mí me apetece estar activa, seguir la rutina… ¡Estudiemos juntas la idea de viajar al extranjero! ¡Me gusta!
    - Laura: ¡Perfecto! ¡Me encantaría!
    - Daniela: ¡Manos a la obra amiga!
    - Laura: Será una bonita experiencia. Me voy para clase que llego tarde. Esta noche te llamo y hablamos.
    - Daniela: Chao, buen día.

    ResponderEliminar
  27. Mónica Sosa9:36

    Imagen 1: dialogo entre dos amigas
    - Bueno, ¿que te pasa amiga? ¿Porqué tanta prisa para quedar?
    - No me pasa nada, solo que tenía que desahogarme, y quería que fueras tú la primera en enterarse
    - ¿Qué pasa? ¿Qué es lo que me tienes que contar?
    - No, antes cuéntame tú, ¿que tal en tu nuevo trabajo?, ¿Qué tal te va por el hospital? Me han dicho que es bueno y que siempre hay trabajo, ¿no?
    - Si, la verdad es que estoy muy contenta, todo va de maravilla, lo único es que mi jefe es un poco especial, y le encanta mandar, se cree que por tener un cargo tiene que ser tan malo con todo el mundo, pero ya te contare, cuéntame tu ahora, ¡que me muero de la intriga!
    - Pues… a ver… que tengo una noticia, no sé si es buena o mala…
    - ¿Qué es?¿ Qué pasa? ¡¡Cuéntame!!
    - Pues, allá va, que tengo un retraso, que no me ha venido todavía. No se si es bueno o no, llevamos un tiempo hablándolo, pero no sé, ahora que parece que si me entran las dudas, no es el momento, no sé cómo decírselo a Rodrigo…
    - Ohhhh!! Que guay tía, me estabas asustando, pensé que iba a ser otra cosa, por teléfono sonaba peor….pero es una buena noticia…
    - Bueno, ¿Qué hago? ¿Como se lo digo?
    - Todavía no se lo cuentes, vete al médico, cuando estés segura díselo, será lo que Dios quiera.
    - Gracias amiga, voy a llamar al médico a ver que me dice
    - Mantenme informada, nos vemos
    - Sí, después te llamo, un beso
    - Hasta mañana

    ResponderEliminar
  28. Iván Rodríguez García10:32


    La propuesta que he elegido ha sido la elaboración de un monólogo a partir de la imagen titulada “Domingo” de E. Hopper.
    “Bueno, aquí me veo otra vez, como todas las semanas reflexionando sobre qué ha pasado para llegar hasta este punto. No creo que lo haya hecho tan mal esta vez, solo que a esta edad ya el cuerpo no responde de la misma manera, así que debería ser un poco más comprensivo en ese sentido. Pero bueno, por más que me pase aquí otro día reflexionando no voy a solucionar nada, como siempre, así que será mejor que empiece a moverme de nuevo, que cada vez pasan los días más rápido y parece que fue ayer cuando estuve sentado de nuevo aquí reflexionando sobre los mismos temas y hace ya una semana realmente. Cada vez que lo pienso parece que sea mentira que hayan pasado ya cincuenta años desde que vine aquí con una mano delante y otra detrás, sin un sitio donde caerme muerto y ahora este aquí contando los días para jubilarme y pasar más tiempo con mis nietos, a los que no he podido ver casi por tener que trabajar para que mi hijo pueda darle tres comidas al día.

    Vaya hombre, ya de nuevo dije que me iba a levantar para irme y volví a darle vueltas a los mismos asuntos de siempre, ahora si será mejor que me levante y me vaya, antes de que mi mujer se ponga nerviosa y encima me lleve una bronca al llegar a casa.”

    ResponderEliminar
  29. Acoidán González12:17

    La obra que he escogido es el cuadro número dos.

    Y otra tarde más estoy aquí, sentado, en esta acera qué tantas penas me ha oído contar…
    Muchos me dicen que no puedo seguir con este ritmo de vida, pero, ¿qué hago? Al menos cuando me siento en una de las butacas de esta cantina, por un momento me olvido de todas mis penas y, me siento un hombre feliz. ¿Por qué me castigas tanto, Señor?, ¿Acaso en otra vida fui un perro cruel? No creo que este martirio lo merezca nadie, y por supuesto tampoco yo, un hombre que siempre ha trabajado para sacar a su familia adelante, para que no les falta de nada, mi esposa contenta, mis hijos, que los hemos educado para que estudien lo que ellos quieran, pero, ¿y yo?, ¿no es momento ya de pensar en mí y arriesgar todo para de una vez por todas ser feliz? Muchas veces he pensado en lo peor, pero, cuando me doy cuenta de lo que voy a hacer me tiembla el pulso y pienso todo lo que les voy a hacer sufrir, sobre todo a ella, que me espera cada noche como la primera noche en que nos vimos, con ese “te quiero” entre sus labios y ese brillo en la mirada con el que solo ella sabe mirarme…
    ¡Ups!, ¡qué frío!, es hora de volver a casa.

    ResponderEliminar
  30. Efrén Guzmán Alonso12:20

    Mi propuesta es el cuadro 1 en donde se tendrá que realizar un diálogo entre sus protagonistas.

    (Nueva York, año 1952. Estados Unidos y Rusia se encuentran en medio de una carrera armamentística por el poder)

    Sarah: - ¿Estas segura de que nadie nos localizará aquí?
    Jessica: - Segura, confía en mi. ¿Has traído lo que te pedimos?
    S: - Por supuesto. He tenido que sufrir mucho para llegar hasta aquí, ya no puedo echarme para atrás.
    J: - Perfecto. ¿Estás segura de que no se han dado cuenta, verdad?
    S:- Sí. Logre obtener los informes cuando el Krysthof no estaba en el almacén.
    J:- Eso esperamos. Y bien, ¿donde están los informes?
    S: - Se encuentran a buen recaudo. Están en mi...
    J: - ¡Calla! Las paredes oyen, y no se puede confiar en nadie más que en nosotros mismos.No te fíes de nadie, ni tan siquiera de la pareja que está detrás tuya, cualquiera puede destaparnos.
    S:- Perdón, es que estoy muy nerviosa... Esta es mi primera misión como agente infiltrada. Además hacer de novia de Krysthof ha sido horrible. Tanta maldad, tanto odio, tanta...
    J: - Ya está. Estas aquí, con nosotros, lo has hecho bien.
    S:- (Sniff) Gracias.
    J:- ¿Por cierto, has conseguido el "prototipo X" de Krysthof?
    S:- No, no lo pude conseguir, además yo no supe de su existencia hasta la semana pasada.
    J:- Bueno, no pasa nada, has hecho todo lo que el departamento te ha pedido. Podrás vivir tranquila a partir de ahora, recuperar tu identidad, volver con tus niñas...
    S: - Señora.
    J: - Dime, Sarah.
    S:- Mi último informe fue de hace diez días. Fue el mismo día que concretamos fecha, hora y lugar de la reunión.
    J: - Sí, lo recuerdo perfectamente. ¿Por qué?
    S: - Porque en dicho informe no dije nada del "prototipo X" de Krysthof, pero sin embargo, usted lo ha mencionado. Usted sabe perfectamente de su existencia. ¿Por qué?
    J: - Bueno, no eras la única agente infiltrada en su organización.
    S: - No, si lo era, y en su momento, Krysthof mencionó algo de que su topo en la agencia lo traicionaría.
    J: - ¿Que insinúas?
    S: - Que usted es su topo, y usted es quién quiere el "prototipo X" para su beneficio.
    J: - ¿Y que pasa si lo soy?¿Vas a detenerme?
    S:- Yo no, pero la agencia si.
    J:- ¿¡Cómo!?
    S: - ¡Chicos la tengo! ¡Operación alfa activada!
    J: - ¡Nooo!

    Gracias a la actuación de Sarah, los Estados Unidos de América lograron detener la filtración de datos al bando ruso, y con ello, aún no existe un líder armamentístico. De momento...

    ResponderEliminar
  31. Marcos Castellano Mederos2:40

    He escogido la Propuesta Didáctica: Escribir un monólogo inspirado en el siguiente cuadro de E. Hopper titulado Domingo (1926).

    ¿Qué hago yo ahora? He tenido que cerrar mi negocio, la crisis no nos deja vivir a los pequeños empresarios. Estas grandes superficies acaban con todo. No es lo mismo leer mi cartel “Bar Manolo” que leer “Mc Donalds”. Recuerdo aquella época que pensé cambiarle el nombre y ponerle “Mac Nolo”… ¡Dios mío! Que locuras pensaba cuando era joven. No le debo dinero a nadie, pero si no cierro deberé mucho dinero a mis proveedores; por eso pienso que lo mejor es cerrar. Recuerdo aún aquella época en la que tenía 5 empleados, servíamos mil o más cafés diarios, almuerzos o cenas. Es grande la tristeza que me inunda al tener que cerrar este bar, mi bar. Porque cerrando acabo con la tradición; este negocio tiene más años que yo, lo empezaron mis bisabuelos, lo siguieron mis abuelos y luego mis padres. Yo ya no puedo más y mis hijos… Mis hijos han estudiado y no quieren trabajar en un bar de barrio diez o más horas diarias. Cierro y ya está, a vivir la vida del jubilado; excursiones por aquí, juegos de baraja por allá, caminatas por la mañana y por la tardecita… ¡A mí no me gusta caminar! Lo que me gusta a mi es mi bar. Pero, con mucho pesar, he de comunicar que cierro este precioso bar.

    Adiós Bar Manolo.

    ResponderEliminar
  32. Para esta actividad he optado por realizar un diálogo inspirándome en la primera imagen:

    Lucía: Lo bonito es no tener idea de lo que quieres, pero saber con quién lo quieres.

    Mar: Sí que es bonito, sí.

    Lucía: La verdad, es que yo si tengo idea de lo que quiero, lo que pasa es que lo que yo quiero, no sé si tú lo quieres conmigo.

    Mar: ¿Y por qué piensas eso?

    Lucía: Porque lo que yo quiero ser el motivo de tu sonrisa. Quiero ser la primera que te vea cada mañana, despeinada, con legañas y mal aliento, y aún así me sigas pareciendo la más preciosa de todas. Quiero hacer viajes contigo. Quiero ir a buscarte un día a cualquier hora y decirte: cariño, vístete que nos vamos. Así, sin explicaciones, ni prisas. Sin esa llamada inoportuna y con todo el tiempo del mundo para nosotras. Porque eso es en definitiva lo que quiero. Todo el tiempo del mundo y un nosotras.

    Mar: Te amo Lucía. Pero aunque mi corazón sea tuyo, ahora pertenezco a otra.

    ResponderEliminar
  33. Sara García Acosta12:01

    Buenas tardes a todos.
    El cuadro que he elegido ha sido el de E. Hopper titulado Domingo (1926). Dicha pintura es la que me ha servido de inspiración para este pequeño monólogo.

    Bueno, ya está hecho. Lo mejor será no darle más vueltas a la cabeza. Sin embargo, a esta edad, ¿qué voy a esperar? Si hasta casi soy un estorbo para mi mujer… porque mira que tiene razón, ¡ni un huevo sé freírme! ¡Quién me viera a mi solo sin ella! Hasta los ratones habitarían en casa. Claro está que no debo mostrarme vulnerable ante ella, si no, lo tendría todo perdido y ganaría ella la batalla, como siempre.
    A lo que iba: he de ser positivo. Pero lo quería tanto…realmente no sé si esto es lo que quiero hacer…aunque como dice Antonia: “¡Las prioridades son las prioridades Manolo!”. Claro que esto es una prioridad para ella, no para mí. ¿A quién se le ocurre poner una sala de bingo en su casa? Con todos los lugares que hay en esta ciudad para jugar. Después el hipocondríaco y menopaúsico soy yo, ¡sí señor! ¿Se puede ser más caprichosa que esta mujer?
    En fin Manolo, es mejor que te despidas definitivamente de tu pequeño escarabajo y recibas con la mayor de las sonrisas al Bingo, si no quieres terminar los últimos días de tu vida durmiendo en el viejo sofá de tu suegra.

    Sara.

    ResponderEliminar
  34. Paula Díaz Hernández2:51

    Buenos días,
    He realizado un pequeño diálogo inspirado en el primer cuadro:

    - ¿Fuiste a la entrevista de trabajo?
    - Sí, pero creo que no me cogerán…
    - ¿te dijo algo que te hiciera pensar que no valías para ese puesto de trabajo?
    - No, pero había mucha competencia, habían como seis personas más esperando también para la entrevista, está la cosa muy reñida…
    - Bueno, quizás el resto no valía para ello, así que seas negativa, igual te llevas la sorpresa.
    - Eso espero
    - ¡Suerte amiga!

    Saludos,
    Paula

    ResponderEliminar
  35. Vanessa Naranjo Ferrera4:04

    Buenos días, he escogido escribir un monólogo inspirado en el cuadro 2, de E. Hooper: Domingo.

    ¿Cuántas veces me habré sentado aquí, en el mismo lugar, a lo largo de mi vida? El paisaje ha cambiado, pero la sensación es siempre la misma. Mi pueblo, el que me vio nacer y crecer. Como cada domingo, después de repartir el pan, me siento delante de esta pequeña tienda y no puedo evitar darme cuenta de lo fugaz que ha ido pasando mi vida.

    Veo pasar bonitos recuerdos de mi infancia por estas aceras, entrañables momentos de mi juventud observo de forma clara en la plaza que tengo frente a mí y, desde que me casé en esa iglesia, todo ha sido tan rápido que multitud de imágenes familiares pueden recorrer mi mente.

    ResponderEliminar
  36. Eliana Godoy Suárez5:25

    La opción elegida ha sido la de elaborar un diálogo entre los personajes del cuadro 1:

    -Hablando de todo un poco...¡tenemos que organizar nuestro primer viaje juntas!
    -Me parece un buena idea, pero me gustaría irme lejos, a otro país, otra cultura, otras costumbres...
    -Me parece perfecto, pero tengo que admitir que me gustaría que fuéramos solas.
    -Por supuesto, no hay duda de ello...solas lo pasaremos en grande.
    -¡Bien! ¿Qué país te gustaría visitar?
    -Tratándose de que vamos a ir en verano, pues me gustaría ir a Mykonos...
    -¿De verdad? Es justo el que estaba pensando. Es una isla a la cual he querido ir hace mucho tiempo.
    -Pues no hay mas que hablar, allá vamos...será una auténtica aventura.

    ResponderEliminar
  37. Paula Jiménez Medina5:34

    Imagen 1: Reunión entre dos amigas

    Carlota: Hola Sira ¿Qué era lo que me tenías que contar?
    Sira: Estoy mal, necesitaba hablar con alguien y por eso te he dicho de quedar.
    Carlota: Pero ¿Qué ha pasado?
    Sira: Hugo me ha dejado, me ha dicho que ya nada es lo mismo y que prefiere que cada uno viva su vida por separado.
    Carlota: ¿Y tú que le has dicho?
    Sira: Que no estaba de acuerdo pero respetaba su decisión por muy duro que fuera para mí. No sé qué hacer, no he parado de llorar en todo el día y no tengo ganas de salir de mi habitación.
    Carlota: Sira no puedes estar así, es verdad que se pasa mal y tendrás un tiempo de duelo en el que no le encontrarás mucho sentido a tu vida pero verás que poco a poco sales adelante. Lo mejor que puedes hacer es distraerte, salir con tus amigas, centrarte en tu futuro y tus estudios. Amiga, ni de amores se muere ni de recuerdos se vive.
    Sira: Ya, se que tienes razón pero es muy complicado.
    Carlota: Para eso estoy yo aquí para ayudarte en todo lo posible, no estás sola. Yo también tengo mis días buenos y malos, pero aquí sigo luchando cada día por ser feliz cueste lo que cueste. Ahora no le encontrarás su parte positiva pero más adelante descubrirás que todo pasa por algo y la vida te seguirá sorprendiendo. Recuerda esta frase: Solo hay una persona capaz de hacerte feliz para toda la vida, y esa persona eres tú misma. Empieza a quererte y a valorarte, no necesitas a una persona a tu lado para estar completa porque tú ya lo eres.
    Sira: Muchas gracias Carlota, me siento muy afortunada por poder contar con amigas como tú.
    Carlota: Los amigos son la familia que uno escoge y yo te he elegido a ti. Estaré en los momentos malos y buenos, ese es el verdadero significado de amistad.

    Paula Jiménez.

    ResponderEliminar
  38. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  39. He decidido realizar la opción b), escribir un monólogo a partir de la obra de E.Hopper:

    Sé que ha pasado mucho tiempo, un tiempo fugaz. Todavía recuerdo cómo te despedía. Tú, sin saber lo que te iba a suceder y yo…, yo sin creer que ese sería tu destino. Pero te fuiste. Todavía recuerdo tu sonrisa, la forma en que cada día me dabas los buenos días, la paciencia con que trataste la vida y el día en que nos conocimos. Y te fuiste. Y yo…, yo sin creer tu destino. Y aquí me encuentro, sentado en esta sucia acera, como cada domingo. En el fondo comprendo que poco consigo viniendo al lugar en donde tu vida dio un giro inesperado, avanzó hacia un camino en el que yo no tengo cabida. Pero me basta con recordar que un día exististe, eras mía y eras feliz. Y te fuiste. Y yo…, yo sin creer tu destino. Quizás sea el momento de tomar una decisión, posiblemente la más difícil de nuestras vidas. He de partir contigo. Sin ti no tengo ilusión, la tristeza no se va de mi lado, me ha cogido cariño. No puede continuar. No deseo otro lugar más que en donde tú estés y es por eso que he de partir contigo. Acontecimientos inesperados, hora maldita, llamaradas de fuego. Y te fuiste. Y yo…, yo sin creer tu destino.

    ResponderEliminar
  40. Kevin Pérez Hernández15:30

    Buenas noches. He elegido crear un "monólogo", la opción 2, obra perteneciente a E. Hopper.

    “Bfffffff realmente estoy exhausto, este trabajo me está matando... y realmente no paro de darle vueltas al mismo asunto desde hace semanas… es el momento de tomar la decisión, ¿no crees?
    Tienes una mujer maravillosa, una hija increíble y unos amigos inigualables... llevas años trabajando para darles y darte una mejor calidad de vida y te has olvidado de las verdaderas razones que sostienen tu felicidad y la de ellos, o así creía que pensabas realmente hace unos años... tú sabes que te necesitan, que necesitan de tu presencia en el día a día y de tu cariño... te llevan reclamando desde hace tiempo y no te has parado a valorar todo esto y lo que puedes arrepentirte si no lo cuidas. Ellos siempre te han animado de cara a tu trabajo, en tus ideas y vocaciones... casi siempre porque saben lo importante que es para ti que te apoyen, que te respeten y que crean y confíen en ti, y en otras ocasiones, simplemente, porque te quieren.
    Creo que les debo lo mejor de mí, mi tiempo, mi atención, mi apoyo y mi cariño. Creo que es hora de buscar un trabajo que pueda compaginarlo con lo más importante que tengo, y lo más importante son ellos...
    Definitivamente sí, creo que es el momento de darme y darles una alegría.”

    ResponderEliminar
  41. Nereida Reyes Quevedo6:59

    Buenas tardes;
    He decidido elaborar un diálogo a partir del cuadro 1:
    Brenda: Buenos días Susana ¿Qué te pasó? ¿Por qué me llamaste con tanta urgencia?
    Susana: Hola Brenda, tuve un problema anoche con David y necesito un buen consejo, no sé a quién acudir.
    Brenda: ¿Que te ha ocurrido? Ayer cuando los vi juntos se veían muy bien ¿qué ha pasado entonces?
    Susana: Todo empezó ayer por la tarde cuando mi jefe me llamó a casa para ofrecerme un puesto de trabajo mucho mejor, está mejor remunerado y no trabajo tantas horas como ahora.
    Brenda: Pues lo siento Susana pero no entiendo el problema, ¿eso no es mejor para ti y para David?
    Susana: Claro que es mejor para los dos, el problema está en que me trasladarían a New York y claro a David no le gusta mucho la idea de mudarse.
    Brenda: Susi, sino recuerdo mal, David en este momento no tiene empleo ¿Por qué no va a querer mudarse y probar suerte en otro lugar?
    Susana: Él dice que aquí está su familia y no quiere irse lejos, y debo entenderlo.
    Brenda: Pero David debe entender que es una gran oportunidad y que esta situación puede ser muy positiva para la evolución de vuestra relación.
    Susana: Brenda de verdad no sé qué hacer…Me siento tan presionada
    Brenda: Susi, una pregunta y contesta sinceramente ¿Tú qué quieres?
    Susana: Yo quiero aceptar ese puesto de trabajo, quiero desarrollar mis habilidades laborales y quiero que él esté a mi lado para disfrutarlos juntos.
    Brenda: Entonces Susi, la solución a tu problema ya lo dijiste tú, solo falta saber que decide él. Si cumplir un sueño contigo o seguir soñando solo.

    ResponderEliminar
  42. Diego Morales Méndez9:04

    Buenas tardes,
    He escogido la segunda opción.
    Ayer la miraba, la acariciaba, la tocaba, la abrazaba, la besaba
    Y hoy...hoy nada. No hay nada.
    Quizás tenía que ser así. No, no lo creo.
    ¿Realmente se puede ser culpable de un hecho sin haber estado presente y es la propia ausencia la que en lugar de exonerarme del pecado me convierte directamente en realizador del mismo?
    ¿Es justo confiar en un destino que nos mantiene distantes en aquellas situaciones en las que deberíamos actuar?
    Jamás podré perdonarme no haber estado allí.
    ¿Debería ahora plantearme si en el más allá ella estará mejor y de esta manera engañarme para sentirme inocente?
    Cierto es que en este momento solo quiero aferrarme a esa idea de que el tiempo dirá, pues ahora mismo yo poco puedo decir.

    ResponderEliminar
  43. Patricia Fuentes9:23

    Buenas Tardes, la opción elegida es el cuadro 1. Diálogo.

    Macarena: Luz, ¿qué piensas hacer ahora que cerraste la tienda?

    Luz: Pues no sé Macarena, aprovecharé estos días que está mi suegra en casa para que cuide a los niños mientras salgo a buscar trabajo, pero no estás las cosas muy bien.

    Macarena: ¿Y por qué no sigues atendiendo a tus clientes de siempre pero en sus casas? Eso fue lo que hizo Toni la hija de Luisa y le va muy bien. La pobre no tiene tiempo para nada, porque anda de aquí para allá pero hasta que pueda volver a abrir el loca.

    Luz: Pero Macarena yo no tengo coche, y no puedo depender de mi Antonio para trabajar. Si no encuentro nada creo que me volveré al pueblo que allí nos ayudamos unos a otros y seguro que encuentro algo.

    Macarena: Ay si, como en el pueblo en ningún lado. Mira, Carmelo está solo trabajando en la frutería, podrías ir y hablar con él, tal vez los primeros meses no tiene para pagarte Luz, pero estoy segura que desde que tenga ayuda allí empieza a ganar dinero como antes. Estando él solo allí ha perdido a muchos clientes.

    Luz: Si, eso me dijo mi madre, que ya estaba muy mayor para tanto trote y abre muy poco la frutería.

    Macarena: Pues aprovecha Luz, además a los niños siempre les ha gustado más el pueblo y allí tienen a todos sus amigos y podrán ir al cole de siempre.

    Luz: Voy a hablarlo con Antonio, podríamos alquilar este piso además.

    Macarena: ¡Que sí muchacha!

    Luz: Pues mira, además podría poner en alquiler este piso. Voy a llamar a Antonio ahora mismo.

    ResponderEliminar
  44. Elías Umpiérrez11:49

    Buenas tardes,

    He escogido la segunda opción: ''monólogo''.

    Hice lo que me me dijo mi padre que tenía que hacer para ser feliz en esta vida. Lo he dado todo y trabajado como nadie y...¿Qué me queda? Este viejo bar de solitarios bebedores que ni aún habiendo gente, se escucha un solo ruido...
    Cansado de vivir todas las mañanas la monotonía que ha formado estas arrugas en mi frente. Primero el cartero, luego el afilador, después el butanero y para terminar la vieja marinera maloliente que aunque lleve 30 años diciéndole que no quiero su pescado, sigue pasando a preguntar. La misma gente y el mismo lugar. A veces me pregunto como sería mi vida ahora mismo si hubiera decidido irme al extranjero como de joven pensé. Ya es muy tarde,ese tren salió hace mucho tiempo de la estación y no esperó por mi.Seguiré oliendo whisky y humo de tabaco de liar hasta el día que me entierren. El caso es ¿quién lo hará? .Hoy, le doy gracias a mi padre por su gran consejo.

    ResponderEliminar
  45. Haridian Ojeda13:08

    Buenas noches.
    He decidido realizar la opción 1: el guión.

    Marianela: No esperaba tu llamada, ¿ puedes decirme que era eso tan urgente que debías contarme?
    Lucía: Hola a ti también Marianela. Sabes muy bien que si no fuera importante no hubiese perdido mi tiempo y mi energía en hablar contigo.
    Marianela: ¿ Y bien?
    Lucia: Se trata de mamá. Lleva mucho tiempo preguntando por ti, quiere verte, quiere vernos a todos. Su estado de salud empeora por momentos y comenzamos a temer lo peor.
    Marianela: No sabía que la situación fuera tan grave, ¿ por qué no me has avisado antes?
    Lucia: ¿ Quizá porque desapareciste sin dejar rastro? ¿ Tal vez porque tu misma nos alejaste de cualquier pista que nos condujera a ti?
    Marianela: ¡ Basta Lucía! No tengo el deber de darte explicaciones. Llévame hasta mamá, ella es la única que las merece.

    ResponderEliminar
  46. Me he decantado por la segunda opción:

    Después de toda una vida a su lado, aquí estoy: solo.

    Preciosos recuerdos quedan grabados en mi corazón gracias a todo lo que me enseñó.
    Preciosa ella... ¡aún la quiero!

    Si tuviera que desearle algo a la humanidad, le desearía que cultivara el amor por los suyos como nosotros lo hicimos:

    COMPARTIAMOS en Mayúsculas. No es que pensáramos de igual manera, pero nos compenetrábamos a la perfección. Era una relación liberada de celos, angustias o problemas. Era increíble.

    Ahora me corrijo: aquí estoy, solo y con el corazón lleno. ¿Qué más desear?
    Quizás que todos pudieran vivir una situación similar o superior.

    ResponderEliminar
  47. Buenas a todos, he elegido la opción B (monólogo).

    ¿Qué estoy haciendo con mi vida? Hace ya siete años que perdí a mi mujer por ser un completo gili… y estoy a punto de ser desahuciado, no encuentro trabajo por más que lo intente y estoy sentado en el bordillo de una acera inhóspita, lamentándome, sin fuerzas.
    Debo luchar, así me educaron, a no tirar la toalla ante las adversidades y si la caída es demasiado dura, me servirá para levantarme más fuerte.

    Porque en esta vida hay que luchar, porque si luchas puedes perder... pero si no luchas estás perdido.

    ResponderEliminar
  48. La propuesta elegida es la número 2: El monólogo. Título : " El sillón "

    Aún recuerdo aquel sillón, en el centro del salón, que compré junto a mi mujer, embarazada de mi primer hijo. Lo recuerdo como si fuera ayer, la licorería iba viento en popa, mejor de lo que esperaba.
    Nos pudimos permitir lujos que hasta entonces no nos podíamos permitir, el sillón, ese sillón, se convirtió en el principio del fín. En el, vimos nacer a mi primer hijo, al segundo y al tercero. Reuniones familiares alrededor de ese sillón se repetían con frecuencia, risas, alegrías, buenos momentos en general. Sentimientos, muchos sentimientos afloraban con el sillón, bendito sillón. Tambíen recuerdo las noches que pase durmiendo en él cuando la parienta se enfadaba conmigo y me señalaba al sillón, que gran sillón. Según pasaron los días y el sillón acumulaba y acumulaba más vivencias, a la vez crecía mi avarícia, mi necesidad de ganar dinero y más dinero para llenar de lujos la vida de mi familia. Trabajé y trabajé muchas horas sin darme cuenta que al mismo tiempo estaba dejando de lado a mi familia. Al pasar tantas horas entre botella y botella me aficioné al licor y la mala vida. Una, dos, tres, cuatro.... ochenta oportunidades me dió mi mujer pero les fallé. Mi familia ya no está y tampoco el sillón, aquel que si pudiera hablar, describiría lo que es la felicidad de un hogar. Aquí estoy, ahora, sentado en la acera, dura, fría y sucia con mi licorería a mis espaldas , 3 cajas fuertes repletas de billetes, pero aún así no tenga nada de lo que importa, no tengo familia y tampoco tengo sillón.

    ResponderEliminar
  49. Lidia Ester Almeida Machado2:17

    Buenos días

    He elegido el cuadro número 2 y aquí alojo el monólogo:

    “Si no fuera tan intenso, probablemente habría desistido. Si no fuera increíble, habría mirado para otro lado y continuado con mi vida. Si no fuera un cambio apetecible, habría seguido con la monótona soledad de los días y, seguramente, me habría perdido los dulces detalles que hacen especial cada segundo que pasamos, furtivamente, en aquellos lugares alejados de la civilización, en ese “mini mundo” donde la felicidad es plena y absoluta. Sin embargo, a pesar de las adversidades, luchadores y capaces, seguimos, día tras días, con la mayor ilusión y pasión, con las ganas y fuerzas jamás vistas, que arrasan con cualquier malestar y con cualquier problema que aparezca. Y en este preciso lugar, en el que ahora me encuentro, hago un barrido general a este tiempo vivido y lo que me viene a la mente son sus ojos, su mirada, sus labios, su sonrisa, su olor, la suavidad de su piel… y un día más, cierro los ojos y disfruto de la pureza de su amor…”

    ResponderEliminar
  50. César Sosa Santana2:37

    he escogido la segunda opción:
    tengo cincuenta y un años y realmente me paro a pensar y no he vivido ninguno de ellos. es como si mi vida empezara en este mismo instante, como si nada hubiera pasado, como si fuera una hoja en blanco pero con la mitad de tiempo que un bebé para poder escribir mi historia. no nos toca decidir el tiempo en que vivimos pero si nos toca decidir qué hacer con el tiempo que se nos ha dado y en este tiempo quiero vivir, no se como voy a hacerlo lo único que se es que en cada acción, cada pensamiento, cada sentimiento pondré la vida en ello. La meta ha cambiado de un segundo a otro, es como si una luz divina hubiera entrado en mi y para quedarse. Intentare usar cada segundo de mi cuenta atrás para encontrarme como persona y elevarme por encima de lo físico.

    ResponderEliminar
  51. “Parece mentira que y hayan pasado 70 años. Abrí esta tienda cuando solo tenía 15 años y 50 pesetas en el bolsillo, y hoy tengo que cerrarla por última vez.
    Recuerdo que cuando abrí esta pequeña tienda nadie creía que duraría más de un día. Nadie creía que alguien tan joven como yo sería capaz de aguantar la presión de controlar su pequeño negocio, creían que necesitaba un jefe más experimentado que me guiara antes de emprender solo el vuelo. Recuerdo la cara de mis primeros clientes, mis padres, una cara que parecía decir “ya se cansará, verá que esto no es lo suyo y hará como su padre y entrará a trabajar en la fábrica”. Y no fueron los únicos que entraron en mi tienda con esa expresión en el rostro.
    Pero poco a poco esa cara pasó a reflejar sorpresa tras el primer aniversario de mi tienda, y cada aniversario su sorpresa era más y mayor, hasta que dio paso a la sorpresa y al orgullo.
    La verdad es que me alegro de que no puedan verme ahora.

    He visto mucho durante estas siete décadas: he visto a los hijos de mis clientes convertirse en clientes, y a sus padres desaparecer como pronto haré yo; gente entrar solo para curiosear y salir con las manos llenas; padres arrastrados por sus hijos que quieren su ración de dulces diaria o el último cómic de su héroe, pero acaban teniendo que arrastrar a su padre fuera de la tienda cuando comienza a leer alguna novela de vaqueros o historia romántica; señoras que usaban la tienda como su punto de reunión de cotilleo mañanero, tomando su té con limón de las 8 en punto; gente que entraba sin saber que buscaba, pero me tenía a mí como guía.
    En esta tienda fue donde la conocí a ella, tan bella con esos rizos caoba cayendo sobre su mirada azul como el mar. Fue la primera vez que un cliente me dejo sin palabras, hasta entonces siempre que me preguntaban por alguna mercancía siempre sabía qué responder, nunca me faltaba de nada. Sin embargo con ella me faltaron las palabras.
    Junto a ella viví 50 años llenos de amor que no cambiaría por nada, fue la compañera de mi vida y siempre sabía que decir para hacerme sonreír, hasta el final.

    Tantos recuerdos guardados entre estas paredes, tantos momentos. Los buenos parecen inacabables y los amargos ínfimos. No imagino mi vida sin levantarme cada mañana y abrir este local para ver a mis clientes de siempre.
    Sin embargo, nada puede detener el progreso, o eso dicen. ¿Qué podría hacer mi tienda contra ese nuevo centro comercial? Supongo que a mi hijo no le bastaba con heredar la tienda de su viejo, quiere algo más, como yo a su edad. Yo con su edad abrí una pequeña tienda, el decidió abrir un centro comercial. Supongo que lo que sí ha heredado de mí es mi ambición.”

    ResponderEliminar
  52. Tigaday Hernández Sánchez3:14

    Segunda opción:

    Cansado de servir alcohol en copas rotas, de ver a personas intentar volar con las alas rotas, de ser el psicólogo detrás de una barra. Pienso que para algunos la barra del bar es un horizonte que nunca podrán abandonar. Me entristezco con cada historia que cuentan mis clientes, con cada uno de sus problemas. Intentan ahogar sus penas aumentando la cantidad de alcohol en sus venas y lo único que hacen es tapar un problema con otro problema aún mayor.
    Perdiendo en muchas ocasiones dinero, tiempo y sobre todo seres queridos. No es agradable ser el camarero de los sueños perdidos, de los incomprendidos, de los hombres y mujeres que suelen caer en el olvido.

    ResponderEliminar
  53. Mari Carmen Alonso González14:42

    Irene: Hola Ana, ¿por qué tanta prisa para vernos ahora?
    Ana: Pues porque he conseguido una información muy interesante para el artículo que estamos escribiendo, y por teléfono no podía comunicártelo.
    Irene: Cuéntame. ¿Qué ha pasado? ¿Han encontrado al cabecilla del Cartel de Juárez?
    Ana: No, aún no, pero he descubierto algo peor… ¿Te acuerdas del inspector de policía al que le hicimos una entrevista hace unos días?
    Irene: Sí claro, el inspector Sánchez…
    Ana: Pues está relacionado directamente con Ignacio Méndez.
    Irene: ¿Con el cabecilla del Cartel? ¿Cómo se ha sabido?
    Ana: Anoche fueron a la misma fiesta, en una discoteca de moda de la cuidad. Una camarera, amiga mía, me lo confirmo.

    ResponderEliminar